El Nex Playground: risas y lágrimas en casa
Imagina un pequeño cubo de tres pulgadas, algo que podría parecer un juguete, pero que se ha convertido en el fenómeno del momento. El Nex Playground, a pesar de sus limitaciones, ha logrado lo impensable: superar las ventas de consolas como la Xbox de Microsoft. ¿Cómo es posible? Bueno, al final del día, todo se reduce a la magia que genera en los más pequeños.
Un sueño hecho realidad para los niños
Este curioso dispositivo no es más potente que muchos teléfonos móviles y solo juega juegos seleccionados y seguros para los niños. Pero cuando mi hija de cinco años se encontraba enferma en cama con fiebre, su única petición fue jugar con él. Y cuando comenzamos una partida de bolos virtuales, hasta el abuelo quiso unirse. ¡Eso ya dice mucho!
Entre risas y frustraciones
Aunque sus gráficos son bastante simples y algunos juegos parecen hechos a la carrera, mis hijos no se preocupaban por eso. Para ellos era pura diversión moverse sin necesidad de controles complicados. Sin embargo, también había lágrimas; el juego puede ser implacable con su sistema de seguimiento corporal básico. La tecnología tiene sus límites y a veces confundía sus movimientos o les robaba turnos sin piedad.
A pesar de sus defectos y frustraciones inevitables —como intentar jugar con pijamas que tienen patrones— los peques han encontrado su rato feliz entre carreras locas y poses ridículas. Es verdad que no todo vale lo que cuesta; hay juegos repetitivos y otros que pueden resultar frustrantes, pero en este mundo caótico del entretenimiento familiar, al menos logramos crear momentos inolvidables juntos.


