Descubre lo que le falta al nuevo iPhone Air: ¡sorpresas y decepciones!

En un evento reciente, Apple presentó su nueva joya: el iPhone Air, un dispositivo tan delgado que parece casi etéreo. Con solo 5.6 mm de grosor, este nuevo teléfono promete ser una maravilla de la ingeniería, pero a medida que profundizamos en sus características, nos encontramos con varios puntos que dejan mucho que desear.
Un diseño impresionante pero con compromisos
Aunque los acabados en Sky Blue, Light Gold, Cloud White y Space Black son visualmente atractivos, no podemos ignorar las numerosas carencias que tiene el iPhone Air. Si bien es cierto que está equipado con un potente chip A19 Pro, comparado con otros modelos de su generación, el rendimiento general podría no ser suficiente para todos.
Uno de los aspectos más criticables es la duración de la batería. Aunque Apple promete hasta 27 horas de reproducción de video offline, se queda corto frente a otros modelos como el iPhone 17 Pro Max. ¿Y qué pasa cuando la salud de la batería empieza a decaer? Puede que nos veamos obligados a cargarlo más veces al día o depender de un cargador portátil. Todo esto contradice el propósito inicial de tener un dispositivo ligero y fácil de manejar.
Aparte del tema de la batería, otra gran ausencia es la cámara ultra-angular. Con solo una cámara trasera de 48 MP, el iPhone Air limita nuestra capacidad para capturar esos momentos especiales desde diferentes ángulos o hacer fotos macro. Vamos, ¡adiós a esas tomas impresionantes de comida o mascotas!
No olvidemos mencionar la velocidad del puerto USB-C y la eliminación del soporte para SIM física; si eres alguien que necesita esa opción por razones prácticas, puede ser otro motivo para mirar hacia otro lado.
A pesar de todo esto, si eres una persona que simplemente busca un teléfono elegante y no le da mucha importancia a las cámaras ni a una batería resistente para el día entero, quizás encuentres en el iPhone Air tu compañero ideal. Pero para aquellos que valoran funciones completas y duraderas, tal vez deberíamos pensar dos veces antes de dejarlo pasar por alto.