Conectando la mente: La historia de Brad y su webcam
Brad Smith, un valiente pionero en el uso de la interfaz cerebro-computadora (BCI) de Neuralink, ha decidido llevar su innovación a un nuevo nivel. Tras recibir su implante hace seis meses, este joven con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) se ha convertido en el tercer paciente en experimentar esta tecnología revolucionaria. Pero lo que realmente ha sorprendido a los expertos de Neuralink es su elección de conectar una simple webcam a su ordenador controlado por la mente.
Un deseo personal
La idea surgió cuando Brad se dio cuenta de que, aunque el BCI le permitía navegar por Internet y comunicarse más rápidamente, había algo que le faltaba: la posibilidad de seguir a su hijo mientras juega al fútbol. «No entendían por qué quería un periscopio», dice con una sonrisa, refiriéndose a la reacción del equipo de Neuralink. Sin embargo, él no se detuvo ante las dudas y empezó a investigar por su cuenta.
Hacks diarios para mejorar la vida
Su búsqueda lo llevó a encontrar la Insta360 Link 2, una cámara común conocida principalmente como cámara para videoconferencias. Con ingenio y un poco de ayuda del equipo técnico, Brad logró acoplarla a su silla de ruedas y ordenador. «Es una maravilla», afirma Nathan Copeland, otro usuario del BCI. Cada día representa un nuevo reto y él está decidido a adaptarse utilizando no solo tecnologías avanzadas sino también herramientas cotidianas. Desde campanas hasta micrófonos amplificadores, todo vale para recuperar el control en una vida marcada por limitaciones físicas.


